Celebrando un día más

Fin de semana "cumpleañero" en #LaCasadeMau en esta ocasión ha sido servidora la que suma un añito más a sus espaldas, aunque creo que otros habitantes estaban más emocionados con este día...

3 A.M. del 18 de Noviembre

- De verdad mami, no hay quien te entienda... ¿en los cumpleaños no se hacen regalitos?
- Sí Freya, pero no ese tipo de "regalitos" y menos a las tres de la mañana. 💩
- Ya, me he pasado madrugando, pero es que quería ser la primera en felicitarte..
- Y lo has conseguido, Freya, lo has conseguido pero la próxima vez #NoMeQuierasTanto 😓


Vuelta a la cama tras limpiar el detallito de Freya, coges de nuevo el sueño y...


6 A.M. del 18 de Noviembre

Paseitos, lloriqueos, más paseitos nerviosos y lloriqueos subiendo de intensidad. 
Arriba de nuevo para abrir la puerta, en esta ocasión Bilbo que al menos ha tenido la delicadeza de avisarme para atender a la naturaleza. 
- Que no mami, eran los nervios por encontrar un buen regalo a tu altura, no quería hacerte una "cagad..." de regalito como una que yo me sé. 😆


Una vez comenzado el día, la rutina habitual: sacar a los perretes, limpiar las habitaciones de los gaticos, fregar cuencos, poner desayunos, recoger el patio, la casa...
Hasta que a media mañana.... la cazadora oficial de #LaCasaDeMau me aparece con un pobre ratoncillo en la boca para dejarlo en una de sus camas frente a mí a modo de presente. Cosas de perretes, con su particular visión de lo que es un presente, pero para mí una punzadita en el corazón tan grande como el pobre bichín que yacía inerte en la cama, para el cual tocó improvisar una sepultura en el jardín. 😢

- Déjame que estoy indignada... Freya tiene razón, no hay quien te entienda y encima eres una desagradecida. Con lo que me ha costado coger a ese ratoncito para darte una sorpresa y tú vas y ¡te enfadas! No pienso regalarte nada nunca más. 😒


Pero no todo son trastadas y pequeños disgustos, que todo esto se olvida con un par (o cientos) de lametones cariñosos, viendo sus caritas de felicidad y alegrándome la tarde con sus juegos. 
Porque la vida con los perretes (y gaticos), no es siempre tranquila, ni mucho menos perfecta; pero no la cambio por nada.

¿Lo mejor del día? 
Sin duda ver que Eileen por fin se está recuperando, ya tiene su ojito casi como nuevo, apenas se le ve el tercer párpado que llevaba más de un mes ocultando el bello azul de sus ojos.


Y por supuesto, celebrar el noveno aniversario de mi Monike. 
Aunque estés un poco loca y a veces me dejes sorda con tus ladridos interminables, fuiste, eres y siempre serás el mejor regalo que jamás he tenido. ¡¡Te quiero pelufi!! 💓

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