Hasta siempre grandullón

Don Pimpón nos ha dejado, su estado era terminal y ayer tarde se durmió para siempre.

Tenía tantas esperanzas, quería verte recuperado y feliz en un hogar, con una familia que te cuidara y mimara como mereces; lo siento... siento no haber llegado a tiempo, siento que haya sido tan corto el tiempo que hemos disfrutado de tu compañía, a veces la vida es terriblemente injusta.
Tan solo me queda el consuelo de que tus últimos días fueron felices, estuviste atendido, disfrutaste de las comodidades de un hogar, de esos mimos que tanto necesitabas y te fuiste tranquilo, rodeado de cariño.

No te has ido solo y olvidado como un callejero más, te llevas un pedacito de nuestros corazones.

Te queremos grandullón y nunca te olvidaremos