Tal día como hoy, hace la friolera de diez años, irrumpió en mi vida un escuálido gatito de enormes ojos azules.
Unos ojos que suplicaban una oportunidad para abandonar la miseria que le rodeaba, unos ojos que se clavaron en mi corazón y pusieron los cimientos para la locura en que se ha convertido mi vida.
Mi dulce Mau, sólo puedo darte las gracias por permitir que nuestra familia creciera y creciera durante esta década, gracias por compartir de buen grado tu casa, tus alimentos, tus mimos y a tus papis, con tantos "hermanit@s" necesitados de esa misma oportunidad que tú tuviste. Gracias por llenar mi vida y FELICIDADES por estos diez añitos, que la próxima década juntos sea como mínimo igual de Mau-ravillosa.
Te quiero melocotón
Comentarios
Publicar un comentario