Peludas Familias: Mau, el origen.

Mami me ha dicho que las amigas de @bigotedepandereta tienen un sorteo muy molón en instagram para concienciar /colaborar contra el abandono y de paso conocer nuestras #peludasfamilias 
Así que, he cogido prestado el móvil para contaros la historia más importante en esta gran familia peluda: LA MÍA, el dueño y señor de #LaCasadeMau 😸

No recuerdo mucho de mi vida anterior porque han pasado casi 12 años y yo era muy pequeñín; solo sé que tenía muchísima hambre y un montón de bichejos por mi cuerpecillo serrano.
Un día de mucho calor, estaba solito en un descampado muerto de miedo y hambre, empecé a gritar con todas mis fuerzas, hasta que cuando ya casi anochecía mami me encontró (más tarde me dijo que llevaba todo el día escuchando mis lloros y buscándome porque creía que me había colado en la nave donde ella trabajaba); nada más cogerme en sus brazos supe que estaba a salvo, incluso dejé que me bañara y me quedé dormidito en un ronroneo mientras me secaba.
Tras pasar mi primera noche a salvo, descubrí que tenía unos "hermanitos" peludos muy simpáticos, aunque YO era su primer gato. Ella también era mi primera mami humana, así que tendríamos que ir aprendiendo juntos como cuidarnos. 
Fueron unos meses increíbles como gat-hijo único, hasta que un día de mucha lluvia mami llegó a casa con una gatuja esquelética y llorona que no me dejaba tranquilo, era mi hermanita Noe. Tardé unos días en aceptarla pero al final descubrí que estaba bien eso de tener una hermana gatuna con la que jugar y siestear.
Pasamos unos años estupendos, con toda la casa y los mimos para nosotros, hasta que a los papis se les fue la pinza y empezaron a meter en casa a todo "bicho" que se encontraban. 😾
A algunos solo los escuchaba unos días encerrados en una habitación para recuperarse de la operación esa que mami se empeña en hacernos a todos; otros se quedaban un tiempo y luego se marchaban, MI casa se había convertido en una especie de hotel donde no paraban de entrar y salir peludos. 
Y así fue hasta que empezaron ha hablar de algo llamado "crisis", no sé que será, pero desde entonces los perros y gatos que llegaban a casa no se marchaban. Eramos tantos que tuvimos que cambiarnos a una casa más grande, me alegré porque creía que allí no nos encontrarían pero siguieron llegando: gatos legañosos, babosos, esqueléticos, ¡hasta algunos rotos!. 
Reconozco que al principio no me hacía mucha gracia compartir a MI mami, MIS cosas y MI comida con todos ellos, pero luego vi que tenían tanto miedo como yo había tenido siendo pequeño, así que decidí darles una oportunidad y la verdad, no está tan mal compartir con ellos MI casa y un poco de mi felicidad.

Mi primer día en casa después del baño
Curándome las orejitas
 Conociendo a mis hermanitos: Nicky, Andreita, Pika y Popi 
 Mi primera hermana gatuna: Noe

 Los reyes de la casa

¿A que soy guapo? 
Mis hermanitos Shonyi y Chispi

La Casa de Mau: con mis hermanitos "los gordis"
Neón y Owen "los inmunitos" 
no les conozco porque a Neón no le gusta mucho la compañía
Esta es la habitación de "los peques" (aunque ya no lo sean tanto)

Y los perretes

¿Que os parece mi gran familia peluda? 😻

¡Ah! Olvidaba deciros el por qué de mi nombre. 
Resulta que tras aquel día en el descampado debí quedarme sin voz porque mis papis no me escucharon maullar ni una sola vez, hasta que un día me puse malito, tuvieron que meterme en la caja de visitar al señor de verde y nada más pisar la calle.... ¡mau, mau, MAUUUUUUU! 


Comentarios