Esta noche es cualquier cosa, menos buena.
No quedan lágrimas, solo unos ojos doloridos y un vacío en el alma imposible de describir.
Cinco días después de perder a Kenzo, perdemos a un nuevo luchador. Ha sido un año duro para Mango, en el que la enfermedad le ha ido consumiendo poco a poco, por mucho que se aferraba a la vida, no se puede vencer a la señora oscura: llevamos algo más de dos meses de tratamiento y Mango seguía perdiendo peso, anoche empezó con diarrea, las puntitas de sus orejas caídas y líquido libre en el abdomen. No podía permitir que siguiera sufriendo.
Mi pequeño Mango, has sido fuerte como pocos, mereces descansar y volar libre sin más dolor.
Mami Melissa, tú hermanito Kiwi y los amiguitos que partieron antes, ellos te acompañarán, hasta que nos volvamos a encontrar.
Te quiero, para siempre 💔🌈
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