El día había empezado genial, súper feliz por haber capturado a Silver y poder ofrecerle una vida más tranquila, sin celos, ni peleas.
Pero ahora, no puedo dejar de llorar de la ansiedad.
Seguramente soy una exagerada, pero hasta ahora, siempre, he dejado a los gatos que he castrado como mínimo, una noche en casa para que se recuperen lo suficiente.
Por desgracia, con Trufa en el cuarto de baño que usaba para este fin, era imposible, si hubiera sido alguno de sus antiguos compis de colonia, lo habría metido, pero a Silver no lo conoce. Aún así, aprovechando el buen tiempo, le había preparado un jaulón en una zona del patio al que no tienen acceso los perros, pensando en liberarle a última hora de la tarde pero Silver estaba muy estresado, incluso se ha hecho una herida en la nariz de empujar las rejas, buscaba una y otra vez cómo salir. Para colmo, le he puesto un poco de comida y han empezado a aparecer avispas... Un desastre.
Al final, tuve que liberarle cuando solo habían pasado unas 4 horas de su castración y del estrés que tenía, ha salido saltando un muro que da a una zona distinta a la habitual. Aunque supongo que la conoce porque lleva meses rondando por todos los alrededores y estaba bastante despierto. No puedo evitar sentirme fatal por no haberle protegido mejor y sobre todo preocupada por él. Solo espero que esté bien y por favor, que venga mañana a desayunar. 🙏🏻💚
EDITO 12/09/25
Con los nervios, he salido a dar el desayuno a la colonia diez minutos antes de lo habitual. Solo estaban: Odín, Panettone, Wanda, Dunia y Savanna.
Poco a poco fueron apareciendo los demás y.... ¡Silver! 🎉
Lo primero que hizo fue restregarse con mis piernas, como si quisiera consolarme. 🥰
Ahora que ya respiro tranquila, presento oficialmente al bollito CER número 29
¡Bienvenido, Silver! Te cuidaremos lo mejor posible.
Comentarios
Publicar un comentario